La estrategia Qué tengo que leer hacer referencia al tipo de texto al que nos enfrentamos. Esta estrategia busca familiarizarse con las características del género concreto. En este artículo explicamos los beneficios de utilizar la estrategia Qué tengo que leer.
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¿Qué implica esta estrategia de lectura?
¿Sabrías decir en qué consiste la estrategia Qué tengo que leer? Consiste en predisponerse a leer con tres acciones:
- Leer el título y hacerse preguntas.
- Determinar las características del género que se lee.
- Dar un objetivo a lo que se va a leer.
¿Qué tipos de texto solemos leer?
Por tanto, esta estrategia sirve para escanear de un vistazo el texto que voy a leer. De manera que puedo intuir el género textual y prepararme para comprenderlo. No es lo mismo leer un relato de ficción, que una noticia que el prospecto de un medicamento.
Adam, a comienzos de los años 90, discutió la tradicional clasificación en tipologías o géneros textuales. La complejidad y heterogeneidad de los textos hace que no se pueda hablar de un único tipo de texto en cada uno, sino que más bien tienen secuencias tipológicas. ¿Qué quiere decir esto? Que no existen «textos puros», pero sí se pueden distinguir fragmentos de distintas tipologías (Adam, 1992).
Así, los géneros más amplios comparten su tipología principal (dominante). Estas son las cinco secuencias que establece Adam:
| Secuencia | Descripción | Géneros principales |
| Narración | Sucesión de hechos y unidad temática. | Cuento, fábula, leyenda |
| Descripción | Presentación de las cualidades o propiedades de algo. | Reglas del juego, retrato, entrevista, biografía |
| Argumentación | Modificar creencias, opiniones, acciones. | Anuncio |
| Explicación | Informar para que se comprenda un fenómeno. | Instrucciones, receta, experimento |
| Diálogo | Intercambio comunicativo entre emisor y receptor. | Musical, conversación, debate |
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Beneficios de la estrategia Qué tengo que leer
Solé concluye su apartado sobre los tipos de textos destacando la importancia de enseñar a reconocer los géneros. No se trata, señala ella, de que los alumnos aprendan todas las características de cada tipo de texto, sino de que sepan reconocerlo cuando lo lean. «La estructura del texto ofrece indicadores esenciales que permiten anticipar la información que contiene y que facilitan enormemente su interpretación» (íbidem).
- Genera unas expectativas. No es lo mismo saber que vas a leer un cómic que un texto científico. Conocer el tipo de texto nos hace pensar en unos contenidos y una estructura posibles.
- Anticipa los características y una organización determinada. Cuando lees un cuento, entiendes que va a haber una trama que se resolverá al final. Si lees una leyenda, puedes esperarte elementos fantasiosos, o si lees un artículo científico, sabes que habrá datos, fuentes e investigaciones que lo respalden.
- Plantea un marco de lectura. Los «tipos de texto o superestructuras funcionan para el lector como esquemas de interpretación» (Solé, 2018).
- Permite trabajar textos variados. La riqueza de tipos de textos prepara a los alumnos para la variedad a la que se enfrentará en su vida cotidiana.
- Activa conocimientos previos, porque anticipa información del texto.
En efecto, estas dos estrategias anticipan elementos del texto que ayudan a su comprensión. Las dos estrategias cumplen con la función de contrastar, unir y comparar las ideas del lector con las del texto.
Qué tengo que leer en Abrapalabra
El programa de comprensión lectora Abrapalabra incluye en todas sus unidades una actividad de la estrategia Qué tengo que leer. Antes de la lectura es el momento idóneo para reflexionar sobre los rasgos del texto que trabajan en la unidad.
Abrapalabra trabaja la identificación del género de diversas maneras. Se pregunta por la definición del género concreto, sus características, sus diferencias con otros textos similares o sus rasgos de estilo y lenguaje.
Aquí puedes algunos ejemplos de sus unidades:
| Definición del género
| Títulos posibles
|
| Características del género
| Reconocer un fragmento
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| Elementos del género | |
 |  |
Además de estas actividades, Abrapalabra trabaja un apartado al que ha llamado «CLAVES». Como este:
A lo largo de las actividades y, en especial, antes de comenzar la redacción de los textos propios de los alumnos, se explican y recuerdan las principales características de cada género textual. Te encantará saber que también aplicamos esta estrategia en Secundaria, en el programa Entrelíneas. Suscríbete a nuestra newsletter y te llegarán todos nuestros artículos. ¡No te lo pierdas!
Bibliografía
Adam, J.M. (1992). «Los textos: tipos y prototipos. Relato, descripción, argumentación, explicación, diálogo». Paris: Nathan.
Solé, I. (2018) Estrategias de lectura. Barcelona: Instituto de Ciencia de la Educación.
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