La adolescencia es la etapa de crecimiento por excelencia. Por eso, desarrollar competencias emocionales como empatía, autoestima y tolerancia a la frustración ayudará a los adolescentes a encontrar el rumbo entre tantos cambios. ¡No te pierdas estas 5 actividades de educación emocional en secundaria!
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¿Qué es la educación emocional?
La educación emocional es un proceso educativo orientado al desarrollo de competencias emocionales, un aspecto clave del desarrollo integral de la persona (Bisquerra, 2018). Por eso, el experto en educación emocional Rafael Bisquerra se pregunta:
«¿Cuál es la finalidad de la educación? ¿Transmitir conocimientos o formar personas?»
Los dos fines van de la mano. Por eso la educación emocional es clave en secundaria, el momento de crecimiento por excelencia.
¿Por qué es importante la educación emocional en secundaria?
La educación emocional en secundaria es importante por tres razones:
- El fin de la educación y el fin de la educación emocional es el mismo: la formación integral de la persona.
- La educación emocional ayuda a prevenir trastornos psicológicos, tan presentes entre los problemas de los adolescentes de hoy en día.
- Por último, además de prevenir problemas, mejora la motivación y orienta hacia la felicidad.
En definitiva, la educación emocional puede ser una herramienta muy útil para ayudar a los colegios a educar en competencias para la vida. Si quieres saber cómo hacerlo, aquí tienes cinco actividades de educación emocional para adolescentes. ¡Esperamos que te sirvan de ayuda!
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Actividades de educación emocional en secundaria
1. Conciencia emocional: El mural de las emociones
A partir de periódicos, revistas, tweets e incluso cartas del juego Dixit, los alumnos harán un mural en la pared con las emociones básicas: alegría, miedo, tristeza, ira, sorpresa. También puede servir exhibir en clase el póster del Universo de las Emociones.
2. Regulación emocional: Role-play
Aprender a regular las emociones tiene que ver con calmar las emociones negativas, superar la tristeza o tolerar la frustración, pero también con saber expresar nuestras emociones. De hecho, a veces las emociones pierden intensidad cuando le contamos a alguien cómo nos sentimos.
Por todo ello, este juego puede ser muy útil para que los adolescentes se abran. Esta actividad usa la técnica educativa de la dramatización. Se divide a los alumnos en tres equipos, y cada grupo tendrá que representar una escena. Se deja el role-play a la improvisación, siguiendo pautas como estas:
- Escena 1: Es viernes por la noche y te han invitado a una fiesta de cumpleaños. Llevas toda la semana deseando ir a esta fiesta. Te lo has pasado tan bien que llegas a casa dos horas más tarde de lo acordado con tus padres. Cuando llegas, te están esperando despiertos.
- Escena 2: Juan y Teresa llevan seis meses saliendo juntos. Aunque al principio se llevaban bien, han discutido mucho en las últimas semanas y Teresa ha conocido a otro chico en clase de inglés. Hoy han quedado para hablar de su relación. Teresa ha decidido romper con Juan.
- Escena 3: Quedas con tu grupo de amigos a comer un sábado. Estás triste y preocupado porque un chico de clase lleva meses haciéndote ciberbullying. No se lo has dicho a nadie porque te da vergüenza, pero tus amigos te notan algo raro.
3. Autoestima: Un gran poder conlleva una gran responsabilidad
La educación emocional en secundaria es mucho más que juegos divertidos. Por ejemplo, esta actividad para desarrollar la competencia de la autoestima hace que los adolescentes examinen sus acciones y vean si pueden o no mejorarlas.
Así, se proponen una serie de situaciones cercanas a ellos y tienen que marcar en una línea su grado de responsabilidad para cada situación:
Situaciones:
- Suspendo un examen.
- No hago los deberes.
- Llueve y mi hermano se ha mojado por completo.
- No tengo dinero para hacer un regalo, ya que me lo he gastado.
- Un compañero de clase no ha aprendido su papel en una obra de teatro.
- Me he dormido y he llegado tarde a clase.
A continuación, los alumnos elaboran una lista de situaciones que les pasen y anotan el grado de responsabilidad que tienen. Sobre las que tienen control, tendrán que sacar ideas para mejorar.
4. Competencia social: ¿Estás bien?
Una de las mejores herramientas para la educación emocional y en valores son las historias, ya sean videos, cine o literatura. Por eso esta actividad consiste en ver el cortometraje Are you okay? sobre el bullying, la empatía y la amistad. Seguro que genera una conversación muy interesante en el aula sobre el superpoder de preguntar «¿Estás bien?».
5. Vida y bienestar: Subasta de valores
En este juego los alumnos tendrán que imaginar la ciudad ideal. Para ello, se divide a la clase en dos equipos y cada equipo representa una ciudad. Para construir la ciudad tendrán que comprar los valores que hagan de la suya la ciudad ideal.
El docente conducirá la subasta de valores como estos:
- Generosidad.
- Salud.
- Competitividad.
- Éxito.
- Familia.
- Amistad.
- Amor.
- Dinero.
- Orden.
- Libertad.
- Empatía.
- Educación.
- Sinceridad.
- Amabilidad.
Cada ciudad solo puede tener 7 valores, así que los alumnos tendrán que reflexionar sobre qué es prioritario.
Como ves, la educación emocional en secundaria es una gran oportunidad para ayudar a los adolescentes a crecer en plenitud. Y es que, el desarrollo personal tiene mucho que ver con una vida ética, feliz y que haga felices a los demás. Si aún quieres más, entonces el programa de valores y educación emocional de secundaria Talentum es para ti.
Bibliografía
Bisquerra, R. (2018). Educación emocional para el desarrollo integral en secundaria. Aula de secundaria. 28. 10-15.
Cuadrado, M. y Pascual, V. (2009). Educación emocional. Programa de actividades para Educación Secundaria Obligatoria. Madrid: Wolters Kluwer.
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