Definición de tristeza para niños

La tristeza, por definición, es una emoción básica que surge de la experiencia de la pérdida de algo o alguien con quien hemos establecido un vínculo afectivo. Conoce nuestra definición de tristeza para niños.

Hoy te traemos un nuevo post para intentar ofrecer una buena definición de tristeza para niños. Así, te sera más fácil hablar sobre esta emoción con los más pequeños.

Claves de la educación emocional

Descarga el ebook gratuito

 

¿Cómo explicar la tristeza a los niños?

Para poder explicar la definición de tristeza a un niño, primero es necesario que nosotros conozcamos bien el sentido y significado de esta emoción. Y es que en ocasiones resulta compleja de explicar.

La tristeza, por definición,

es una emoción básica que surge de la experiencia de la pérdida de algo o alguien con quien hemos establecido un vínculo afectivo.

 

En este sentido, el vínculo afectivo que desarrollamos al nacer con nuestros cuidadores nos facilita la supervivencia. Y a medida que crecemos, aprendemos a vincularnos con otras personas y a disfrutar del afecto que recibimos de ellos.

Este vínculo afectivo es el origen mismo de la tristeza. Y es que se trata de una emoción que forma parte de la tríada emocional compuesta por el dolor, la tristeza y la melancolía.

Efectos de la tristeza

Otra manera de definir la emoción de la tristeza es a través de sus efectos. Por ejemplo, la tristeza suele manifestarse como hipoactividad. Es decir, pocas ganas de realizar cualquier actividad.

Asimismo, el llanto suele ser la manifestación habitual de la tristeza en los niños. Sin embargo, el llanto no es algo necesariamente negativo en los niños. Las lágrimas ayudan a los niños a expresar sus emociones y las necesidades más básicas de supervivencia. A su vez, les ayuda a liberar la tensión que estas les producen.

Y otras veces, la emoción de la tristeza en los niños se puede manifestar de la forma contraria.

  • Mostrarse más distraídos.
  • Presentar más hambre de lo habitual.
  • Que les cueste iniciar el sueño o se despierten varias veces durante la noche.

En cualquier caso, el cuerpo siempre avisa cuando experimenta cambios bruscos de humor o cuando vive emociones intensamente.

Sin embargo, resulta de vital importancia mantenerse siempre atentos a las posibles manifestaciones de tristeza en los niños. Y es que en un artículo publicado en la revista Anales de Psicología observan que «Los adolescentes manifiestan sentir la tristeza con mayor intensidad que los niños y que los adultos».

¿Te gusta lo que estás leyendo?

 

Recibe gratuitamente nuestros contenidos

y novedades destacadas en tu email.

 

 

Cuatro características de la tristeza en los niños

Te ofrecemos cuatro características de la tristeza que te pueden ayudar a completar la definición de esta emoción cuando quieras hablar de ella con los niños.

  1. Al sentir tristeza, nos sentimos más llamados a pedir ayuda y buscar consuelo en los demás.
  2. Sentir tristeza nos hace valorar y disfrutar mejor la emoción de la alegría.
  3. La tristeza favorece que actuemos con precaución y sin precipitarnos, puesto que nos avisa de posibles riesgos.
  4. La tristeza no es una emoción permanente; se pasa cuando logramos entender por qué nos sentimos así y lo aceptamos.

Al elaborar una definición de tristeza para niños, puedes explicarles que cuando estamos tristes, nos cuesta sonreír o incluso reírnos de las bromas y los chistes que en otros momentos nos harían gracia.

De hecho, la tristeza es como un velo o un cristal sucio que no nos deja ver las cosas con claridad y las enturbian. En general, esta emoción provoca que veamos todo desde esa postura de pesimismo y oscuridad, aunque la realidad sea muy distinta.

¿Cuándo sienten tristeza los niños?

Por otra parte, a la hora de elaborar una definición de tristeza para niños, puede ser útil dedicar algún rato a que ellos mismos identifiquen las situaciones que les suelen generar tristeza.

Según la definición de tristeza, puede producirse cuando a los niños les ocurre alguno de estos acontecimientos.

  • Pierden a un ser querido.
  • Se despiden de un amigo.
  • Se acaba el rato de jugar, el fin de semana o el verano.
  • Ven sufrir a alguien a quien quieren.
  • Se sienten solos o inseguros.
  • Les arrebatan un objeto por el que sienten algún tipo de apego.

Si ves que los niños están pasando por alguno de estos momentos y les cuesta mantener la alegría, puede animarles el realizar actividades que les gusten y que les hagan cambiar la inercia de la tristeza. Pero no tienes que tener miedo de esta emoción y tampoco de llorar. Porque llorar es bueno si sabes cómo. Si te ha gustado esta definición y te interesan otras emociones, hemos escrito varios posts en nuestro blog dedicados a hablar con los niños de la alegría, el miedo, la ira y la empatía. ¡Esperamos que te sirvan de ayuda!

 

Bibliografía

Siverio, M. A. y García, M. D. (2007). Autopercepción de adaptación y tristeza en la adolescencia: La influencia del género. Anales de Psicología, 23, 41-48.

Claves de la educación emocional

Qué son las emociones, cuáles son las habilidades emocionales, ¿hay emociones malas? Todo esto y más en el ebook sobre educación emocional.

PROGRAMA DE EDUCACIÓN EMOCIONAL

Conoce nuestro programa de educación emocional ¡Be Happy! Todas las claves para ser feliz y encontrar el sentido personal. A tus alumnos les encantará.

Relacionados

¡ÁLBUMES ILUSTRADOS!

Descubre nuestros álbumes ilustrados: Cuentos clásicos como nunca, 25 cuentos populares de España, Fábulas de Esopo 25 cuentos populares de Perú