Puede que hayas tenido buenas y malas experiencias con la lectura en tu aula. En cualquier caso, mejorar la competencia lectora de tus alumnos será gratificante para ti y para el resto de docentes, que también notarán el progreso. Descubre cómo lograrlo en clase.
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Todo sobre comprensión lectora
Una definición de competencia lectora
Yendo de las partes al todo, toda competencia hace referencia a la «pericia, aptitud o idoneidad para hacer algo» (RAE). En este caso, esta habilidad se aplicaría a la lectura.
La competencia lectora es una destreza lingüística que permite la comprensión e interpretación de textos.
Dentro de esto, podemos distinguir tres fases o tareas:
- Leer. Todo el proceso de descodificación, es decir, conocer y reconocer las letras y sus uniones.
- Comprender. En el segundo paso, encontramos la relación entre signo y realidad, significante y significado. Así, unimos las letras con la realidad a la que se refieren.
- Interpretar. Pero para lograr la competencia lectora no es suficiente con reconocer las palabras y sus realidades Debemos añadir un tercer componente de sentido y valoración personal, pues hay relaciones no explícitas por descubrir.
Por otro lado, surge la gran duda: ¿Es lo mismo competencia lectora y comprensión lectora? En la comunidad educativa no hay acuerdo. Es decir, no están claras sus diferencias ni los campos en los que escoger una y otra. De hecho, se utilizan «como sinónimos y describen una misma noción».
En resumen, la competencia lectora se considera una competencia comunicativa -por no decir que la más importante. ¿Por qué? Porque la lectura es la base de cualquier conocimiento y se necesita, por tanto, para desarrollar las demás competencias.
¿Cómo mejorar la competencia lectora?
Isabel Solé es una de las referencias en la enseñanza y aprendizaje de la lectura en el mundo hispano. Tomamos algunas ideas suyas y otras del pedagogo Juan Cruz Ripoll para mejorar la comprensión lectora de tus alumnos:
- Motivarles. La motivación es un factor clave en cualquier proceso de aprendizaje. Por eso, mostrarles los beneficios de la lectura y su utilidad les predispondrá para leer con mayor atención.
- Presentar lecturas atractivas. Jugará a tu favor ofrecerles textos que les interesen, que despierten su imaginación y que les hagan pensar.
- Analizar las tipologías textuales. Cuanto mejor conozcan las características propias de cada género, más sencillo les resultará anticiparse a lo que se van a encontrar.
- Aumentar el vocabulario. Es fundamental, pues sin vocabulario no podrán comprender plenamente.
- Enseñar estrategias de lectura. Tus mejores aliadas. Son como bastones en el proceso de comprensión, y son tan variadas que ayudan en todos los aspectos: significado literal, síntesis, inferencias, evaluación…
- Fomentar la metacognición. Si, conforme pase el tiempo, consigues que tus alumnos conozcan cómo es su comprensión y las tareas que deben realizar, ellos mismos se autorregularán durante la lectura.
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Actividades para el aula: primaria y secundaria
Por último, son muchísimas las posibilidades para trabajar la lectura y la competencia lectora en clase. Además de las más tradicionales, aquí proponemos algunas actividades concretas para desarrollar la comprensión lectora.
- Historia inacabada: se propone un texto incompleto, que presenta una situación y a algunos personajes, pero no tiene un desenlace. Por parejas o individualmente, tendrán que elaborar un final razonable.
- Fichas de personajes: tras la lectura, se les pide a los estudiantes que elaboren una descripción de los personajes. Será como un análisis exhaustivo de quiénes son, qué buscan, cómo actúan, quiénes son sus amistades, etc.
- Ordena la historia: cada alumno tiene un fragmento del texto y entre todos tienen que ponerlos en orden.
- Cuentacuentos: ellos se convierten en juglares, que cuentan lo leído a los demás.
- Conversación escrita: en lugar de comunicarse oralmente, que lo hagan por escrito. Buena técnica para trabajar tanto la comprensión como la escritura.
Por otro lado, no queríamos terminar sin mencionar a los alumnos con problemas de lectoescritura. No todos llevamos el mismo ritmo en el proceso de aprendizaje de la lectura y la escritura. Por eso, tendrás que dedicar más atención y realizar actividades específicas para que vayan mejorando. El resultado merecerá el esfuerzo.
Y si lo que buscas es trabajar la competencia lectora en profundidad, puedes utilizar programas para las distintas etapas. Abrapalabra propone textos atractivos con estrategias y pegatinas para todo primaria. Y Entrelíneas continúa enseñando los procesos de PISA y la producción escrita en secundaria. Con materiales así, ¡tus alumnos dominarán la competencia lectora!
Bibliografía
Cairney, T. H. (2011). Enseñanza de la comprensión lectora. Ediciones Morata.
Solé, I. (1992). Estrategias de lectura. ICE de la Universitat de Barcelona y Editorial GRAÓ.
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